Hay algo en común entre los hermanos Lawrence y los 90’s: el “UK Garage”, aquella escena electrónica nacida en Inglaterra y relacionada directamente con las discotecas.
A pesar de ser demasiado jóvenes para una escena pesada a nivel musical, Guy y Howard (19 y 22 años respectivamente) sabían que no se metían en terrenos fáciles y tenían que ganarse el respeto por sus propios méritos. En el 2012 saltaron a la palestra con “The Face EP”, el cual es una mezcla de deep house y dubstep, géneros añorados por los ingleses en los clubes.
“Settle” es el primer álbum de los hermanos Lawrence y para resumirlo, es fineza en todo sentido. El disco abre con una rítmica “When A Fire Starts To Burn”, le sigue “Latch”, donde Sam Smith hace suya la canción, colaborando en la parte vocal y añadiéndole pinceladas de blues. En parte, el éxito de “Settle” se debe a sus colaboraciones vocales que en su mayoría son talentos jóvenes emergentes en diferentes géneros musicales (Aluna Francis de Aluna George, Jessie Ware, London Grammar), donde podemos encontrar canciones con un sonido pulido, un bajo rico al oído y bases con gran impacto rítmico.
Algunas canciones de “Settle” pueden resultar parecidas con otras pero no son iguales, es un disco que atrapa si te gusta el garage y el house, y cada corte tiene un toque espectacular que los hermanos multi- instrumentalistas han exprimido hasta el tope.